“Intérprete”

No se porque imagine que a veces quiero ser como un diablo y no dejar más almas algunas, quizás porque a ella la mato la culpa por haberme robado una parte del alma. Fue así que encendí mi mente con su demonio.

El olor a velorio y tantas caricias secas, parecen como piedras en el fondo del mar, duras por dentro, como se siente mi pecho cuando la verdad es la palabra justa.

Sobre la caja de mi ego, yo camine descalzo. En este cuarto no hay gravedad, me pierdo en un zigzag, como una gota en el desierto.

Miles de lunas pasaron y yo estaba ahí esperando; todo parece estar queriendo cerrar una herida, lejos de abandonarme, cerca de despedirme. Pero si algo es verdad, es que nunca me olvido, juntando hoy la resaca de ayer, me di cuenta que ya conozco el cuento, soy leña mojada, se me paso el invierno.

Pasa el tiempo y ahora creo que el vacío es un lugar normal, soy mas fuerte que el limbo porque se que la vida es solo un rato. Manche la pasión con tinta china, me encerré en mi mundo y ahora solo oigo los ecos de mi armonía.
No estoy muerto, solo solté las penas y brinde por ese amor, bebiendo grapa para olvidar mi dolor.

Son como amigos que traicionan y fingen ayudarte, donde la justicia atrapa ratoncitos pero nunca un elefante; de la noche a la mañana peleo por mi vida, pelo a la vida.

Estoy por hundirme en un vaso medio vacío, floto como un corcho luchando por el mañana y viviendo hoy una dulce condena.

Estoy llorando la muerte de mi soledad. Evito encontrarme con ella, pero siempre la ubico en el mismo lugar. No encuentro razones para seguir respirando, el dolor no termina y no puedo salir, las heridas son muchas y el río de mi cicatriz se seca rapidamente.

Mi código no son palabras, solo son gestos. El gesto es pariente del hecho, pero el gesto tiene manifiesto. La ideología es hoy, pues ya no podrá ser arrancada por la soberbia de la justicia, para todos la luz, para mi el dolor y vos la alegría. En los gestos esta la transformación…